Me Gustaría Decirte...

Al oír tu voz en la mañana o quizás al verte puesta mi camisa, sonriente mientras contemplo tus piernas a través de mi dulce despertar, en mis labios aun arde el sabor de fuego de los tuyos, en nuestra piel aun pueden verse las marcas de tanta pasión derramada, cada gota de sudor que nos empapa placenteramente y nos transporta hacia otra dimensión… ¿Quién eres? ¿Hacia donde me llevas? ¿Puedes darme la paz que mi alma necesita? Te necesito... Me dejo atrapar por el sonido de tu encanto, por tus caricias y tus “te quiero”, me dejo llevar hacia el punto en el que me encuentro de pie en la cima del mundo al pronunciar tu nombre, puedo verlo en el cielo, en el horizonte aun por surcar, en mi camino que aún no se acaba, en mis días, en mis noches, en la tristeza de mi alma que sin querer te llama sabiendo que eres un amor prohibido. ¿Dónde anduve todo este tiempo? ¿Dónde deje mis sueños? ¿Acaso creí haberlos perdido? No, no fue así, ahora lo sé, aunque esta respuesta traiga consigo muchas preguntas mas, pero al fin y al cabo ¿Qué importa?... Le enseñas lo maravilloso de tus noches de lunas, estrellas y cafés, a mis madrugadas sedientas de tu olor, de tu sabor, de tus apuros, de tus aviones que despegan con rumbo ¿Quien sabe donde?... 

En un movimiento casi imperceptible te tomo por la cintura y juntos podemos ver a través de la ventana como va naciendo el sol, en cada suspiro que respiro siento que muero y vuelvo a la vida una y otra vez, una y otra vez hasta el cansancio, pero no me canso para nada, podría quedarme así para siempre, podría para siempre mirarte, besarte y desearte como ahora, como en este momento, como en esta mañana…. El recorrer tímido de mis labios por tu piel, tus manos explorando cada parte de mi cuerpo, sentimos el universo latir en cada momento, en cada risa cómplice que desnuda nuestras almas dejando entrever en cada pétalo de dulce emoción divina coronada por voces que pronuncian tu nombre en mi cerebro hasta el infinito…. Perdemos la noción del tiempo, aquí estamos enfermos de placer, envueltos en sabanas blancas jugando a hacer el amor hasta enloquecer con tanta emoción contenida hace tanto tiempo…… No me dejas ir, no quiero hacerlo, te ansío, te extraño aún estando cerca, ¿Cómo hacer, que hacer? Te necesito tanto, no lo sabes, o quizás si, me conoces tan bien que me desconozco, nunca permití a nadie hacerlo, llegas hasta el fondo de mi ser, me llenas por completo, me enloqueces con tu forma de hacerlo, deliras con mi manera de morderte cariñosamente en ese punto que solo yo se que te gusta, te excita, te encanta……

Me encantas desde el último de tus cabellos hasta la punta de los pies, nada queda librado al azar, somos entes que vagan en nuestros propios mares de atracción sexual, nos movemos en la misma dirección con un ritmo que nos supera por completo…. Tanta pasión… Nos une ese vaivén de tus caderas meciéndose en mis piernas, terminando una y otra vez, tu perfume me enloquece, me abrazas, te abrazo tan fuerte, siento estallar el cosmos como en un poderoso big bang dando lugar a la creación de nuevos mundos, espacios, estrellas… Miles de ellas rodean con su aura nuestras cadenas de sensaciones extremas, extrañas y no tan poco conocidas… Tu humedad me llena por completo, me sabe a néctar, el calor de tu cuerpo aún tembloroso junto al mío, esa sensación fugaz de saber que somos uno y que nunca nos separaremos me hacen saber que estoy vivo, que lo hago gracias a ti, que cada segundo que pasa me enamoro mas y mas, que todo esta fuera de control pero no me importa, nada nos importa… No hay enigmas, ya no existen en mi dimensión, todo ya pasó, todo ya cambió… Puedo ver cada cosa en su lugar, mi desorden ordenado me paraliza por completo, mis ojos te buscan, te ansían, tanto como mis demás sentidos, no puedo hacer otra cosa, no se hacer otra cosa… ¿Qué significa todo esto? Quisiera poder encontrar las palabras correctas, pero es todo tan confuso y atractivamente seductor, encantador, me dejo ir, volar … ¿Sabes una cosa? Me haces feliz, muy feliz... Me gustaría decirte que…...

Partida

Es una lastima que decidas irte, me acostumbre a pensarte cerca aún estando tan lejos, quizás rogar que el día de mañana, el futuro pueda ponernos frente a frente o quizás no, pero me gustaría mucho poder mirarte un ratito a los ojos, sentir tu presencia aún en mis sueños, paraliza mis sentidos, me hace sentir extraño. Tan extraño, pero me gusta, me encanta, no tienes idea de cuan feliz me haces con solo escuchar tu voz, o ver tu mirada en esa foto vieja que me atrapa como la más dulce de las flores con un aroma muy especial….

No debería hacer esto, lo se, muchas veces lo dijiste, pero sabes que soy el más terco de todos, puedes hacer de mi lo que quieras pero no me importa, no me interesa, mis sentimientos siempre fueron hacia ti y no lo va a cambiar nada ni nadie, no soy obsesivo, lo sabes, se respetarte pero no al punto de que trates de hacerme olvidarte, eso no, no lo acepto, aunque me siento como un león dando vueltas, no eras una presa, eres mi sorpresa preferida, mis pensamientos dormidos, mis sueños muertos que volvieron a la vida gracias a tus ¡hola! De ese lado, tantas veces deseado. Aún hoy, das un giro de 360° sobre mi humanidad, metiéndote en lo más recóndito de mi universo incomprensible, sabiendo que mis preguntas no son una respuesta coherente, sabiendo que mi loco caminar sin cesar me lleva hacia ningún lado, como un ente aparentemente diferente de la gente que pasa mirando sin mirar, vidrieras enormes de vacío eterno sobre la monumental pobreza cósmica del vivir sin hacerlo del todo… ¿Hacia donde me dirijo? No lo sé, quisiera poder decírtelo, contarte como estoy, preguntarte como estas vos, saber de tu vida, de tus cosas; pero tengo que conformarme solo con tu recuerdo, solo con estas pobres líneas que son tan poco, para describir lo magnifica que eres.

Eres grande ante la grandeza (valga la redundancia) de los demás, tu forma de pensar me eclipsó por completo desde aquella primera vez, haciéndolo mas y mas hasta ahora, me gustó la sencillez con la cual me atrapaste y aún lo haces por tus líneas y tus diseños que van más allá de mi conocimiento, de mi mente que vaga por distintos puntos imaginarios perdiéndose una y otra vez, construyendo algo de acuerdo a una idea, de acuerdo a mi fría forma de ver todo. La calidez de tu alma, de tus palabras mágicas. Te extraño… No se decir otra cosa, lo hago de la forma más triste con la cual un ser humano puede sentirse, lo hago no importándome lo que los demás piensen, lo hago sin sentido, puede ser, pero ¿Qué más da? Se que ya no volverás, se que ya no piensas en mi, se que mi horizonte de humo se hace cada vez más apesadumbrado, que mis abismos son cada vez más grandes para saltar, que los mundos por explorar me llevan por otros caminos, desviándome de tu magnificencia, no deteniéndome un segundo…… Si tan solo me dijeras……

Me siento extraño ¿Sabes? No se que me pasa hoy, quizás sea que me estoy haciendo viejo y solo me estoy conformando con recordar, quizás sea eso, es triste volverse viejo, es triste tener que conformarse solo con eso, tal vez sea que el día esta nublado y mis ganas de reír se aplacan al escuchar el latente palpitar de tu memoria en mi memoria, no quiero que pienses que me haces mal, todo lo contrario, si no que, tal vez no se expresarme bien, aún no lo logro poder manejar mis sentimientos, después de todo este tiempo, creo que me perdí, sigo siendo el mismo, pero en otra dimensión… ¿Alguien mejor o peor? No lo sé, me gustaría poder ver más allá de mis propias elecciones, quisiera muchas cosas, pero no las logro y el tiempo se acorta y me desespero por hacer que todo marche sobre ruedas, no se que hacer, no quiero quedarme aquí en este punto, no quiero morirme sin haber llegado a hacer todo aquello que me propuse, aún no, no es mi tiempo, no quiero rendirme, no quiero caer… En mi rabioso caminar siento que mis fuerzas se debilitan y no logro ponerme en pie, pero es tan grande el deseo de seguir que no me detengo, medio muerto avanzando contra todo sin importar como, siempre hacia el frente… Pero sin ti, y no sabes como duele tener que ver esa vieja fotografía, no tienes idea de lo que significa que tu imagen se desvanezca en medio de esta niebla…… No tienes idea de cuanto puedo extrañarte… Y sin querer lo hago…

La Respuesta II

Un viento frío sopla desde el sudoeste, trayendo consigo un oscuro y macabro mensaje, poco acogedor; bastante aterrador es oír el aullido de las hienas romper el silencio cristalino de estrellas que esconden su brillo entre las negras nubes de tormenta, que en lo más alto y profundo del cielo, surcan mi fatídica existencia…. Poco a poco, los minutos van llegando a su fin, siento los latidos de mi corazón que se aceleran, las sienes martillean a un costado, la nada se acerca al mismo tiempo que el aletear de los murciélagos eriza mi piel hasta elevar los sentidos al máximo de su potencial.

Una vieja calavera clavada en lo más alto de un poste a la entrada del santuario, parece darme la bienvenida con su lúgubre melodía de muerte atenta, la misma que saborea el festín de antemano… Una tormenta se desata rabiosamente y golpea las paredes, así también como la vieja cúpula que parece querer caerse a pedazos...… De pie ante las puertas del infierno, poseído por espíritus que gritan desde el interior, pujan por salir y arrasar con todo.… Miles de lenguas de fuego se encienden a mi paso, al final de la gran nave central puedo divisarlo, allí está el más poderoso e implacable enemigo…… Ojos en llamas se apoderan de mi figura, rodeando el espacio sideral de mis pensamientos, tratando de meterse en mi cabeza; una gran energía cósmica penetra en lo más recóndito, creando imágenes espectrales, espejos e ilusiones; las mismas visiones una y otra vez, tratando de enloquecerme.

Siento mis manos temblar, mi voz ronca aturdiéndome, mis fuerzas casi al límite de lo imaginario…. Siento mucha rabia, totalmente fuera de mí, no puedo controlarlo. Lucho hasta el cansancio conmigo mismo, se nubla mi visión, caigo de rodillas pero no me importa, yo sigo hasta el final…… Un sonoro entrechocar de espadas, hay destellos de luces y pedazos de metal que vuelan por el aire, el poderío del rival hace inclinar la balanza hacia su lado, pero no me doy por vencido. Un gran estruendo sacude el viejo edificio hasta tal punto que parecería, se viene abajo…. La gran cúpula cede y los vitrales con imágenes diabólicas, se destrozan bañándonos en multicolores y sombrías formas…. Un rayo cae en la parte central y nos arroja en distintas direcciones; los ojos ciegos me observan con una furia demoníaca, haciéndome retroceder un par de pasos.

De pronto las sombras se alzan tras de mi, dándome toda su energía…. Los músculos tensados, dientes apretados, el final se acerca, puedo sentirlo; como en una de esas pesadillas, la más horrenda de todas. Las figuras se desdibujan, lo color se torna en blanco y negro… Un reloj se detiene en algún lugar del universo, me encuentro perdido en esta realidad – espacio – tiempo, caminando en círculos sin poder llegar hacia ningún lado, los portales hasta hoy cruzados me llevan hacia un plano totalmente desconocido, no puedo salir, estoy atrapado en la más oscura de las dimensiones…. Hay dolor, angustia, soledad y miseria; un vacío sin límites se abre dentro de mí, dejando salir mi alma que avanza a grandes tropiezos contra este gigante imposible de vencer…. Nos miramos fijo, mientras él ríe triunfante, todo comienza a desvanecerse…… Una densa niebla gris se alza delante de mí…. Un fuerte temblor sacude la tierra, mis puños cerrados y los nudillos al rojo, golpean este cristal irrompible. Lágrimas de impotencia caen a cántaros por mis mejillas, mientras el destino vil se lleva consigo la respuesta más importante de todas…...

La Respuesta...

Un viento frío sopla desde el sudoeste, trayendo consigo un oscuro y macabro mensaje, poco acogedor; bastante aterrador es oír el aullido de las hienas romper el silencio cristalino de estrellas que esconden su brillo entre las negras nubes de tormenta, que en lo más alto y profundo del cielo, surcan mi fatídica existencia…. Poco a poco, los minutos van llegando a su fin, siento los latidos de mi corazón que se aceleran, las sienes martillean a un costado, la nada se acerca al mismo tiempo que el aletear de los murciélagos eriza mi piel hasta elevar los sentidos al máximo de su potencial….

Una vieja calavera clavada en lo mas alto de un poste a la entrada del santuario, parece darme la bienvenida con su lúgubre melodía de muerte atenta, la misma que saborea el festín de ante mano… Una tormenta se desata rabiosamente y golpea las paredes, así también como la vieja cúpula que parece querer caerse a pedazos.… De pie ante las puertas del infierno, poseído por espíritus que gritan desde el interior, pujan por salir y arrasar con todo…. Miles de lenguas de fuego se encienden a mi paso, al final de la gran nave central puedo divisarlo, allí está el mas poderoso e implacable enemigo.… Ojos en llamas se apoderan de mi figura, rodeando el espacio sideral de mis pensamientos, tratando de meterse en mi cabeza; una gran energía cósmica penetra en lo más recóndito, creando imágenes espectrales, espejos e ilusiones; las mismas visiones una y otra vez, tratando de enloquecerme… Siento mis manos temblar, mi voz ronca aturdiéndome, mis fuerzas casi al límite de lo imaginario…. Siento mucha rabia, totalmente fuera de mí, no puedo controlarlo.…

Lucho hasta el cansancio conmigo mismo, se nubla mi visión, caigo de rodillas pero no me importa, yo sigo hasta el final…. Un sonoro entrechocar de espadas, hay destellos de luces y pedazos de metal que vuelan por el aire, el poderío del rival hace inclinar la balanza hacia su lado, pero no me doy por vencido.… Un gran estruendo sacude el viejo edificio hasta tal punto que parecería, se viene abajo...… La gran cúpula cede y los vitrales con imágenes diabólicas, se destrozan bañándonos en multicolores y sombrías formas.… Un rayo cae en la parte central y nos arroja en distintas direcciones; los ojos ciegos me observan con una furia demoníaca, haciéndome retroceder un par de pasos.… De pronto las sombras se alzan tras de mi, dándome toda su energía...… Los músculos tensados, dientes apretados, el final se acerca, puedo sentirlo; como en una de esas pesadillas, la más horrenda de todas.…

Las figuras se desdibujan, lo color se torna en blanco y negro.… Un reloj se detiene en algún lugar del universo, me encuentro perdido en esta realidad –espacio –tiempo, caminando en círculos sin poder llegar hacia ningún lado, los portales hasta hoy cruzados me llevan hacia un plano totalmente desconocido, no puedo salir, estoy atrapado en la más oscura de las dimensiones.… Hay dolor, angustia, soledad y miseria; un vacío sin límites se abre dentro de mí, dejando salir mi alma que avanza a grandes tropiezos contra este gigante imposible de vencer… Nos miramos fijo, mientras él ríe triunfante, todo comienza a desvanecerse.… Una densa niebla gris se alza delante de mí.… Un fuerte temblor sacude la tierra, mis puños cerrados y los nudillos al rojo, golpean este cristal irrompible…... Lágrimas de impotencia caen a cántaros por mis mejillas, mientras el destino vil se lleva consigo la respuesta más importante de todas….

Apiadate de Mi...

Tengo una visión en el cual puedo oír tu voz llamándome con tu melodía de luna, con tu aroma de estrellas que se entrelazan tratando de atraparme en el mas hermoso de los sueños, esa clase de sueños de los cuales no quieres despertar, pues temes perder ese instante de locura divina, capaz de transportarte hacia otra dimensión, esa dimensión mágica, en la cual puedes hacer todo lo que tu imaginación te dicta...… Tu voz se acerca y se aleja de mi mente, me envuelve entre rimas y caricias, me siento volar y tú me elevas hacia lo más profundo de la noche, hacia otro universo cósmico espiritual, puedo oír un coro de ángeles y miles de luces rodeando el espacio aparente de mi paz interior encontrada si querer en este lugar tan distante...… Tan distinto es todo aquí, me llena por completo, me hace sentir vivo, tu roja cabellera suelta al viento, tus ojos verdes feroces que llegan hasta el punto mas recóndito de mi ser, erizas mi piel con tu canto quemándome al tocarla tan suavemente como una brisa que llega para no marcharse mas…...

No te vayas, quédate hoy a hacerme compañía, hoy no quiero estar solo, por favor quédate y déjame disfrutarte, déjame oírte cantar, déjame poder saborear tu perfume, no quiero ser un ente mas sin sentido, no hoy, por favor quédate, hoy me siento vacío, lleno de esta nada que me consume eternamente; ayúdame hoy no quiero sufrir, quiero sentirme libre tomado de tu mano, quiero abrazarte por al cintura y si es posible no dejarte ir nunca mas, por favor… Siento que te acercas, me susurras palabras en un idioma extraño y me dejo llevar, tan plácido, complacido de esta manera tan dulce que tienes al andar, al cruzar el estrecho pasaje a mi mundo tan carente de sentido...… Puedo sentirte…. Si, puedo saberte tan cerca…... Por un largo instante logro escapar, reír y cantar junto a ti, atrapado en este vórtice espectral que se apodera por completo de mi silencio, dejando de lado las penas y mi cruz tan pesada, al lado del camino, el mismo marcado de espinas que tratan de colarse tratando de hacer jirones con mi pobre humanidad que se acurruca a tu lado…

Puedo sentir que me proteges del más atroz de los ataques de este enemigo implacable, incansable que azota mis mares de aparente calma...… Dentro de un inmenso campo de energía me encuentro, alumbrado solo por el fantasma lunar que perdura hasta desaparecer tu figura y contigo mi mal…... En un movimiento mecánico me doy cuenta de que estoy despierto, otra vez la realidad me recibe dándome la espalda, tratando de ignorarme como hasta ahora, como siempre, desde siempre; pero no me importa, se que una vez caída la noche, entrarás en mi arcón de ilusiones dándole ese soplo de vida a este cuerpo de barro maltrecho, pero que se sabe feliz al poder estar contigo...…

Saberte cerca confunde mis sentidos, me siento totalmente paralizado, petrificado, abrumado, avasallado por tanta energía radioactiva que va mas allá de mi, me traspasa por completo, me hace saber verdades nunca conocidas, me llevas explorando un universo de completa y absoluta realidad cero, en la cual mi caída libre se detiene, mis apesadumbrados cansancios desaparecen por completo, mi hombro se consuela con el tuyo, mis lagrimas las enjugas con tu canto de sirena desatando el nudo de mi corazón perdido entre tanta tribulación...… No quiero despertar nunca, no quiero volver a mi mundo de pesadilla, dame la paz que mi alma necesita, si es posible llévame junto a ti hacia otra galaxia, como en uno de esos cuentos épicos, llévame hacia él, tele transpórtame hacia tu magnífica morada… Mujer apiádate de mí…. Llévame contigo como en un cuento épico.… Por favor mujer, apiádate de mi… toma mi vida, hazla tuya por siempre… Apiádate de mí…. Llévame contigo, hazlo sin importar como, sacrifícame al viento con tu canto que hipnotiza, no me dejes aquí… Como en un cuento épico… Mujer, apiádate de mi….

Calle Melancolia...

Hoy sin querer escuche el tema que te gustaba, sin querer caí en la trampa de la nostalgia… Mi melancolía me abrazó como haciéndome suyo y juntos nos encontramos caminando por sus calles, las mismas que me cobijaron hace ya un largo tiempo, nos miramos, sonreímos, recorrimos el universo celeste, los callejones ocultos de cada lagrima derramada por ese gran amor que se desvaneció como arena entre mis dedos...… Tu nombre golpea mis sienes, los latidos de mi corazón se aceleran al ver el departamento donde vivías… Recorriendo sus calles, mi melancolía me habla, me cuenta donde estuvo durante todo este tiempo, como y porque sucedieron tales cosas, que ya nada es lo mismo a lo que era. Al llegar a esquina soledad, doblamos hacia la derecha encontrándonos con mi triste Yo que caminaba perdido sin rumbo, lo vi pasar y no pude contenerme y lo invite a tomar un café juntos, los tres, saludándonos como grandes amigos que se encuentran después de muchísimos años… Como un gran sueño, como un gran cuento que nunca tendría que acabar, así nos sentimos volar, a cada rincón de nuestros arcones personales llenos de angustias, risas y llantos contenidos con una gran fuerza demoníaca traspasando el horizonte gris y oscuro de nuestros azules pensamientos élficos…

En algún lugar se oyen las campanas de una iglesia, su sonido es tan poco conmovedor ahora que me encuentro parado en este punto, todo lo confuso se ve un tanto mas claro y tan poco conmovedor a como lo encontraba hace algunos años ¿Recuerdas mi yo, caminando codo a codo por los estrechos senderos apesadumbrado por mis cruces?… Y tu melancolía, ¿Me recuerdas cuando rendía un triste culto a lo que vendrá, pagando una especie de castigo por mis propias culpas imaginarias, sintiéndome totalmente vacío y carente de sentido?... No puede ser, tantas anécdotas encerradas en ese baúl, casi puedo sentirlas fluir de nuevo sobre mi ser, van y vienen, me tocan, rozan, ríen, juegan invitándome a ser parte de ellas nuevamente, pero no me dejo conmover tan fácilmente, ya no… Todo cambió por desgracia o por azar, todo o casi, aún puedo saberme vacío aquí y ahora, mi irreversibilidad, mi coraza de hierro me persigue a donde voy, ¿Cómo hacer para escapar? Te juro que lo intento, por ti lo hago, pero tengo miedo de quererte sin medida, no quiero sufrir ni tampoco podría verte hacerlo, te quiero mucho, demasiado, te necesito, pero ¿Eres capaz de darme la paz que mi alma necesita? ¿Puedes hacerme libre de estas ataduras que me tienen preso en esta cárcel de terror, miedo y agonía eterna? Una vez mas necesito saber la respuesta, ¿Cuánto estas dispuesta a arriesgar por este pobre corazón que solo quiere no sufrir mas? Si eres capaz de darme lo que necesito, te abriré sus puertas y prometo ser lo mejor posible, pero dime melancolía, ¿Puedes hacerme feliz?...

La luna y las estrellas nos reciben, mi Yo desea irse a descansar, solo quedamos nosotros, como siempre tu y yo, es curioso, no tenemos sueño, deseamos que la noche sea tan larga como sea posible, hombro con hombro en cada recoveco, parecemos dos niños jugando a dar la vuelta al mundo imaginario de nuestras vidas que, por mas extrañas, distintas y distantes que parezcan, siempre terminan cruzándose, tarde o temprano, como siempre, para siempre, en cierta forma te lo agradezco, eres la única que me comprende, me aconseja y hace sentir que puedo, aunque este cansado, abatido de luchar una y mil veces con mi estupidez infinita y mi terquedad, siempre estas ahí, a un lado del camino… Me acostumbre a ti, en cierta forma no quiero que te vayas, no lo soportaría, por favor no lo hagas jamás o ese día moriré, lo haré desangrándome lentamente, mientras sueño con tus calles, lentamente el frío llegará de una manera en la cual, no me daré cuenta, no se si me interesa tampoco, pero quiero que sepas que eres mi todo, mi complemento… Calle melancolía, esquina soledad, ahora y siempre por los siglos de los siglos… Calle melancolía, esquina soledad…

Soledad

Extrañamente hoy no hay sol. Por el rectángulo transparente y sin vida que separa mi realidad con el mundo exterior, puede verse el gris amargo (una vez mas haciéndose presente) del día (uno mas en mi vida) que comienza con el correr de un viento helado que llega y se va traspasando mi ropa, congelándome hasta los huesos, para al fin dar con su principal objetivo... Mi alma... Siento el latir de su recuerdo nacer desde lo más profundo de mí... Su aroma, la calidez fría de sus manos en mi cuerpo... ¿Como hacer para olvidarte si aun te amo? No existe el abismo que separe la soledad (infinita) de la realidad (bastante irreal), tal ves te busque pero aún sigo aquí en mi propia oscuridad; si soñara con tu risa me dejaría cubrir por la brisa; la esperanza se desvanece de a poco en mi callejón sin salidas...…

Malditas sean mis ansias y el profundo deseo de poder estar contigo, sucumbir ante tus encantos, cayendo vencido ante la humedad de tus besos... Me pueden tus labios, siento que muero entre tus brazos… Nuevamente mi alma se pierde, no puedo vivir sin tu presencia, se que me tendré que conformar con este triste recuerdo… Mi pobre niña, mí amado sueño recubierto de utopía, no me preguntes nada porque mi respuesta no será negativa; entrego mi vida al fuego, pero tu cara de ángel me consume; mi mente extraña, comienza a sentir que eres tú, nada puede ser mejor que eso, eres la estrella en mi manto oscuro, mi tristeza se esconde junto a mí... Tan dulce como la miel. ¿Debo olvidarme que alguna vez fuiste mía? ¿Que alguna vez te amé? Una vez más me entrego a ti... Mi sacrificio, mi soledad...

A cada paso puedo ver tu rostro inundando mis ojos con lágrimas de resignada e inútil persistencia… En algún lugar se oyen las campanas de una iglesia, como si se tratara de un mensaje oculto detrás de sus lúgubres notas… En algún lugar, en otra dimensión, puedo verme a mi mismo luchando contra grandes molinos invisiblemente invencibles… Puedo ver mis brazos y mí andar cansino, por cada recoveco de este camino, tratando (inútilmente) de rescatarte de las garras de ese destino mezquino que solo te quiere para si, no importándole el daño y las consecuencias de estar con ese alguien que no amas… ¡Te amo! Grito (en vano) a los cuatro vientos, no me importa nada, necesito estar contigo, no puedo más… Pero nadie me hace caso, la gente pasa a mi lado, ciega, sorda y muda… Y una vez más, me encuentro de pie divisando el horizonte, a un costado siento que alguien me aprieta el hombro en señal de consuelo, es melancolía quien me observa con su mirada tierna… Del otro lado, alguien me toma del brazo y me invita a perderme en el silencio, disfrutando de el… ¿Su nombre?... Soledad…